Aplícate el protector antes de salir de tu casa. El producto necesita un rato para absorber en la piel y hacer efecto. Además, si te lo pones en la playa te vas a volver una milanesa al primer contacto con la arena. Un tip importante a la hora de proteger tu piel es reforzar el protector en las zonas de tu cuerpo en que el sol pega más duro: mejillas, nariz y hombros.
Para evitar manchas extrañas, no vayas a la playa con perfume ni maquillaje. Además, ten mucho cuidado si estás en contacto con limón, ya que al contacto con el sol, mancha la piel.
Para potenciar el bronceado, tienes que comer mucha fruta y verdura. Especialmente cítricos, zanahoria, tomate y frutas exóticas. También trata de evitar el exceso de alcohol y los picantes, ya que anulan el efecto del bronceado. Mejor hidrátate con agua.
¿Sabías que la mejor forma de broncearte parejo es estar en movimiento? Tu piel va recibiendo el sol todo el tiempo de distintos ángulos y es menos probable que te queden marcas extrañas como cuando estás tirado(a) debajo del sol. Ponte a caminar por la orilla, armen un partido de volleyball o cualquier actividad recreativa que te ponga en movimiento.
Para bajar el color de rojo a dorado, apenas vuelvas de la playa date una ducha con agua fresca y usa cremas hidratantes. Tu piel te lo va a agradecer!!